Sorry por no subir nuevos videos, estas semanas han estado bastante pencas y no andamos muy motivados como para grabar, pero estamos juntando grabaciones para subir otro episodio con nuestra nueva casa y pega.
Llegamos con Vito y los brasileros a Blenheim a trabajar, como a todos los hueones que viajaron, les dijeron que podían ganar mucha plata en las viñas y que el trabajo no era pesado… si, para Hulk no lo será. Resultado, todo mal.
Entramos todos a trabajar con un contractor indio; Los hombres son “pruners” (el que corta la planta), “strippers” (el que desviste la planta ya cortada) y “Trimmers” (los que podan la planta ya limpiada) y a mi me tocó hacer de todo, por lo menos puedo decir que fui stripper en nz, suena cool. Ya haré un especial de trabajo para que puedan ver de qué se tratan las pegas. Las mujeres son “wrappers” (los que dejan las ramas como en la foto, amarrándolas a los cables).
El trabajo los primeros días fue decente y las supervisoras maoríes (feas como el cuco) nos habían agarrado buena porque éramos de los pocos que entendían las instrucciones en inglés y teníamos que traducirle todo a los brasileros, por lo menos aprendimos a improvisar portugués.
A la segunda semana ya se pusieron hueones en el trabajo, no pagaban, despidieron a todos los brasileros por ilegales (cuando los contrataron lo sabían) y dos días después cuando nosotros fuimos a alegar que no nos pagaban aún, también nos mandaron pa la casa. Dos semanas después aún el indio no me paga a mi y sigue estafando gente. Lección; Nunca trabajar para un indio. Aunque suene racista, acá es una ley implícita, si trabajas con un indio te va a cagar. Que raza más mala, nadie que caga en la ducha y que tiene a su mujer para que cocine y le de hijos puede ser un buen jefe. Para los que leen este blog y están por viajar, aprendan de nuestros errores: No indios, No chinos (malasianos, taiwaneses, tailandeses, etc.. amarillo en gral).
La cosa es que trabajamos por dos semanas rompiéndonos el traste con un frío en la mañana heavy para ganar plata y no ganamos ni uno, nos atrasamos con el arriendo, sin plata para cambiar las ruedas del auto, masacrando la mastercard y sin ni uno para pagar cuentas.. un desastre.
Peter, nuestro “padre” kiwi nos encontró trabajo con un contractor que él conoce, un checo. Nos advirtió que el tipo es re estricto y que es muy enfocado a la calidad, así que no puedes ahcer el trabajo julero. Tenía toda la razón, hace dos semanas que estamos trabajando con Alex y Lucas (los contractors) y pucha que la hemos sufrido.
De partida están pagando poco por planta, por lo que hay que hacer muuuchas plantas al día para sacar unas lucas, lo que te muele las manos y brazos. Y como por ley si uno no hace el sueldo mínimo el empleador te lo debe pagar, están todo el día cronometrándote para ver si estás debajo del mínimo y si lo estás lo más probable es que te peguen la patada en la raja.
La Maca está llegando con 500 plantas al día, y yo nica porque tengo que hacer 759 y a lo más que llego es a 630 trabajando 9 horas parando sólo para hacer pipí y tomar agua y pan. Es imposible para un tipo como yo llegar a la cantidad de plantas que piden. Cuando comenzamos a trabajar pagaban 25 centavos por planta y alcanzaba a hacer unas 460, pero ahora la pega es casi la misma (se supone que más fácil pero no hay gran diferencia) y están pagando 16 centavos. Los más rápidos se hacen como 170 dólares diarios y los como yo andamos rasjuñando los 100 y pensando todo el rato que nos van a echar.
Por lo menos no soy el más lento, tengo un polaco y un alemán que van más menos a la misma velocidad que yo así que entre los tres nos damos ánimo y nos reímos de la mierda de situación que estamos viviendo.
Llegamos con Vito y los brasileros a Blenheim a trabajar, como a todos los hueones que viajaron, les dijeron que podían ganar mucha plata en las viñas y que el trabajo no era pesado… si, para Hulk no lo será. Resultado, todo mal.
El trabajo los primeros días fue decente y las supervisoras maoríes (feas como el cuco) nos habían agarrado buena porque éramos de los pocos que entendían las instrucciones en inglés y teníamos que traducirle todo a los brasileros, por lo menos aprendimos a improvisar portugués.
La cosa es que trabajamos por dos semanas rompiéndonos el traste con un frío en la mañana heavy para ganar plata y no ganamos ni uno, nos atrasamos con el arriendo, sin plata para cambiar las ruedas del auto, masacrando la mastercard y sin ni uno para pagar cuentas.. un desastre.
Peter, nuestro “padre” kiwi nos encontró trabajo con un contractor que él conoce, un checo. Nos advirtió que el tipo es re estricto y que es muy enfocado a la calidad, así que no puedes ahcer el trabajo julero. Tenía toda la razón, hace dos semanas que estamos trabajando con Alex y Lucas (los contractors) y pucha que la hemos sufrido.
La Maca está llegando con 500 plantas al día, y yo nica porque tengo que hacer 759 y a lo más que llego es a 630 trabajando 9 horas parando sólo para hacer pipí y tomar agua y pan. Es imposible para un tipo como yo llegar a la cantidad de plantas que piden. Cuando comenzamos a trabajar pagaban 25 centavos por planta y alcanzaba a hacer unas 460, pero ahora la pega es casi la misma (se supone que más fácil pero no hay gran diferencia) y están pagando 16 centavos. Los más rápidos se hacen como 170 dólares diarios y los como yo andamos rasjuñando los 100 y pensando todo el rato que nos van a echar.
Por lo menos no soy el más lento, tengo un polaco y un alemán que van más menos a la misma velocidad que yo así que entre los tres nos damos ánimo y nos reímos de la mierda de situación que estamos viviendo.
El grupo de trabajo es bien bueno, todos son simpáticos y hay italianos, chilenos, mexicanos, brasileros, polacos, alemanes, franceses, japoneses y el otro 50% checos.. puta que hay checos, y pensar que nunca en la vida habíamos visto uno. Es entretenida la diversidad porque cuando hay tiempo te la pasas aprendiendo de cómo es la vida en otros países, que a los checos les gustan las mujeres sumisas, que los polacos quieren pura plata, que a los franceses los odia todo europa, los italianos son iguales que los argentinos, a los alemanes les gustan las orientales, etc.. harto intercambio cultural por lo menos hemos ganado.
A todo esto, los chilenos somos los más pencas para la pega, con excepción de dos o tres, el resto somos todos pajeros comparado con el resto, y no es que nos las tiremos, sino que el resto es inhumanamente rápido, no podemos ni competir, así que todo el día pensamos que nos van a despedir. Espero que no porque ahí si que se nos pone peludo el viaje, pero no puedo rendir más de lo que estoy haciendo ahora, quizás iré puliendo la técnica con los días.
Además de estar como las bolas en el trabajo, se nos rompió una ruda del auto (que hace días que venía por morir) y pucha que fue una experiencia religiosa…a la gata le faltaba una pieza así que tuve que hacerla funcionar con un alicate, cosa que toma haaarto tiempo y fuerza, y cuando logré finalmente poner la rueda de repuesto, también cagó cuando saqué la gata.. shit!!.. pedí prestada una rueda y tuve que caminar como 1km con ella y cuando la probé no entraba así que me tuve que devolver con la rueda..al otro día fui a comprar la rueda y no tenía la parte metálica así que tuve que volver a la viña a buscarla, a todo esto, la viña está a casi 40 minutos de viaje. Afortunadamente Peter me prestó su auto por ese día, así que anduve para todos lados manejando el SUV y no lo choqué!! Un avance para mi.
Eso sería con respecto al trabajo.. definitivamente más duro que cargar sacos de papas, categoría que no pensé que existía, me creía la muerte con las papas y decía que si pasé esa prueba ya todo era en bajada, ahora estamos hasta el loly con las viñas, en la mañana no podemos ni mover los dedos del dolor y nos levantamos a las 6:00am para empezar a trabajar a las 8:00 con -5 grados y con la presión de hacer el mínimo…allí nomás con la idea de ganar muchas lucas en nz.
Es un buen grupo, ordenados y limpios, hasta te lavan la loza y otras veces nosotros lavamos la de ellos. Como llevan ya años viviendo así, todos saben que esto es un sistema donde cada uno aporta. El papel higiénico lo compra uno para todos, nos vamos turnando y cada uno lo hace por iniciativa, si nos pusiésemos sudacas podríamos pasar un mes sin comprar.
A todo esto, con el tema del papel higiénico nos pasó una vergüenza muy tercermundista. Cuando nos cambiamos, pusimos un papelero en el baño como toda casa normal en chile. Pero los europeos tiran los papeles al wáter y listo, entonces hace semanas que se preguntaban para qué está ese papelero allí y si nos sonábamos mucho..jajaaj que vergüenza decirles que allí guardamos los papeles cagados, nos sentimos súper indios (término sólo ilustrativo ya que no es certero dado a que los indios cagan en la ducha y no necesitan papel).
Hice una colección de advertencias de cajetillas de cigarro para los coleccionistas.